Una investigación de la Universidad de California en Los
Ángeles (UCLA) ha alertado del riesgo que puede suponer para
los estudiantes sacrificar el sueño de la noche antes de examinarse para
estudiar más.
Según el trabajo que publica la revista Child Development, el rendimiento óptimo se consigue cuando hay un
equilibrio entre el tiempo de estudio y el sueño. Y, por lo
tanto, hacer un sobreesfuerzo la noche previa a un examen a costa de dormir
poco o nada puede empeorar los resultados.
Los investigadores analizaron las pautas de estudio de 535 estudiantes de
secundaria, a quienes se les pidió que llevaran un diario durante 14 días en el
que apuntar su tiempo de estudio, las horas de sueño y sus problemas
académicos, por ejemplo dificultades para entender algo en clase o malos
resultados en los deberes de casa o en un examen.
En general, los
investigadores encontraron que quienes más estudiaban sacaban mejores
calificaciones, pero al indagar en los momentos dedicados al mismo, observaron
que el hábito de estudiar por la noche -asociado a menos horas de sueño- se
relacionaba con problemas académicos. Asimismo,
dormir poco
también daba lugar a peores resultados el día siguiente.
"El éxito académico puede depender de la estrategia de estudio a seguir,
como mantener un horario constante de estudio,
aprovechar las horas lectivas en la escuela o la universidad y sacrificar el
tiempo dedicado otras actividades en lugar de las horas de sueño", ha
explicado Andrew J. Fuligni, uno de los autores de la investigación.
Extraído de la Revista Muy Interesante, por Elena Sanz con fecha del 27/08/2012